El giro de El Salvador sobre Bitcoin es bastante llamativo. El gobierno está haciendo que la aceptación de Bitcoin sea opcional. Este es un gran cambio para un país que alguna vez pareció estar completamente a favor de las criptomonedas. ¿Y qué significa esto para los pagos transfronterizos de criptomonedas? Bueno, desglosémoslo.
¿Qué está sucediendo con Bitcoin en El Salvador?
El Salvador ahora dice que las empresas no tienen que aceptar Bitcoin si no quieren. También están reduciendo el tema de la billetera Chivo - ya sabes, la que se suponía que iba a facilitar el envío de dinero a través de las fronteras utilizando Bitcoin. Este cambio se produce tras un acuerdo de $1.4 mil millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Están recibiendo esta inyección de efectivo durante los próximos 40 meses, pero viene con condiciones.
El FMI dijo que los riesgos asociados con el proyecto Bitcoin se “diminuyen significativamente”. Básicamente, están bajando el tono a todo el tema de las criptomonedas.
¿Qué significa esto para los pagos transfronterizos de criptomonedas?
Inicialmente, Bitcoin se trataba de hacer los pagos transfronterizos más baratos y rápidos. Pero ahora, parece que ese papel se va a reducir. El gobierno no va a presionar a las empresas para que acepten Bitcoin, lo que significa que hay menos necesidad de una solución de pago transfronterizo en criptomonedas.
Cambios en la forma en que se usa Bitcoin
Con las nuevas reglas, las empresas no tienen que aceptar Bitcoin y los impuestos solo se van a recaudar en dólares estadounidenses. La billetera Chivo era crucial para facilitar las transacciones en Bitcoin, y ahora se va a eliminar. Es un gran golpe a toda la idea de usar Bitcoin para enviar dinero de regreso a casa.
Impacto en los bancos para transacciones internacionales
El mensaje del FMI no solo afecta a la economía salvadoreña. Envía ondas de choque a los bancos para transacciones internacionales. El informe del FMI dejó claro que Bitcoin se está utilizando para eludir los sistemas bancarios tradicionales. Así que, los bancos van a tener que encontrar una manera de lidiar con esta moneda descentralizada que puede escaparse de sus manos.
¿Qué pasa con las remesas?
Las remesas eran uno de los grandes puntos de venta de Bitcoin en El Salvador. La billetera Chivo prometía hacer que enviar dinero a casa fuera súper barato. Pero ahora? No tanto. Las operaciones de la billetera se están restringiendo, y eso es un fastidio para los salvadoreños que viven en el extranjero y que esperaban ahorrar en tarifas de transferencia.
Efecto en los servicios de remesas de bajo costo
La billetera Chivo se suponía que iba a ser una forma más barata para que las personas enviaran dinero a casa. Ahora, va a ser más difícil de usar, y eso podría significar que los salvadoreños paguen más para enviar efectivo de regreso a casa. Los servicios tradicionales son conocidos por cobrar tarifas más altas, y probablemente ahí es donde tendrán que recurrir.
Ajustes a la billetera Chivo
Las operaciones de la billetera Chivo se van a reducir, y eso va a afectar la capacidad de usar Bitcoin para transacciones. El gobierno se está alejando de Bitcoin, y eso significa menos apoyo para quienes querían usarlo.
El panorama general
Este es un gran cambio, y pone el proyecto Bitcoin de El Salvador unos pasos atrás. Bitcoin sigue siendo legal allí, pero el gobierno está básicamente diciendo que no lo van a imponer a nadie más. Este es un cambio enorme respecto a su postura anterior, y podría tener efectos duraderos en cómo se ven y usan las monedas digitales en el futuro.
Una nueva estrategia financiera
El Salvador parece estar cambiando completamente su estrategia financiera. Se están alejando de apoyar a Bitcoin como moneda de curso legal y tratando de enfocarse en reducir su deuda. Este cambio proviene de un acuerdo con el FMI, que está tratando de estabilizar la economía del país.
Futuro de las monedas digitales
Es difícil decir hacia dónde irán las monedas digitales a partir de aquí en El Salvador. Mientras que el papel de Bitcoin en la economía se está reduciendo, no se está sacando completamente de la mesa. El gobierno va a dejar que las empresas decidan si quieren aceptarlo o no. Pero definitivamente ya no es el evento principal.
Esta nueva política representa un enfoque más cauteloso para integrar las criptomonedas en la economía.